jueves, 28 de abril de 2011

Cala Tentudía Monesterio o como casi todo se partió

¡Buenas biciclistas!

Hoy es voy a relatar de forma rápida la penúltima ruta de la S.B.Pepineitor, esta vez acompañados por un viejo sufridor de mis encerronas que de nuevo se siente masoquista y quiere volver a la bicicleta, mi exjefe Rafa, tras su paternidad y no teniendo suficiente sufrimiento decidió aventurarse con nosotros. Y por si fuera poco engañó a su amigo Bruno.

La ruta era inédita para la S.B.Pepineitor y además le teníamos ganas de hacía tiempo, yo puedo decir que desde que empecé en esto de la bici tenía ganas de hacerla, pero siempre por una cosa u otra no la hice esperando tiempos mejores, que nunca vinieron.

La idea básica de la ruta era la de subir al Monasterio de Tentudía en la provincia de Badajoz, para ello rebuscando por wikiloc encontré una ruta que partiendo de Cala en Huelva nos llevaría al monasterio para bajar posteriormente a Monesterio en Badajoz.

La ruta empezó de manera desastrosa, en la primera frenada Jesús vio que no frenaba, tras un vistazo rápido comprobamos que sus pastillas delanteras habían pasado a mejor vida, pero lejos de arrugarse le quitó la pinza de freno delantera y salió rumbo a la muerte, muchos de vosotros pensaréis que estamos locos para hacer 40km de ruta desconocida sin freno delantero, y seguramente llevaréis razón, eso no lo vamos a discutir. ¿Por qué siguió Jesús haciendo la ruta? Porque puede, porque tiene aquello que le es innato a la S.B.Pepineitor, porque tiene el Orgullo Puma, del cual tú, querido lector, o lo tienes (pocos son los elegidos) o no lo tienes (la mayoría de los mortales), porque con ello se nace, no se hace.

Si empezó mal para Jesús, peor le fue a Bruno, ya que en la primera rampa su cadena se partió, pero su desgracia aumentó nuestra leyenda, porque al hacer el arreglo vivimos un momento grande, y nunca mejor dicho cuando saqué mi llave inglesa de 25 cm de larga y todos se partían el pecho jajajaja, ¿por qué llevaba una llave inglesa de tales dimensiones y su correspondiente peso en la mochi-agua? Porque puedo, por eso mismo... Tras arreglar la cadena, ésta no aguantó ni media pedalada y se volvió a partir, por lo que tras volver a arreglarla Bruno se despidió de nosotros y volvió a Cala con 10km de ruta.

La ruta en su casi primera mitad era un ascenso continuado, nada empinado pero muy seguido, mostrándonos nuestra meta entre los pinos.

Sin prisa pero sin pausa llegamos a nuestra cima del día, con unas bonitas vistas de gran parte de Andalucía y de Extremadura, aunque el día estuviera brumoso.

Yo no quería ser menos que Bruno y Jesús y decidí sumarme a la destrucción biciclista, así que de repente mis roldanas de cambio trasero desaparecieron sin más, la explicación es que el día antes había cambiado la transmisión completa de mi bicicleta y no había apretado bien las roldanas. Por suerte las encontré, aunque faltaba un rodillo de nylón que hacía que no pudiera apretarlas bien y que durante el resto de la ruta tuviera que parar cada cierto tiempo para reapretar. En realidad por eso llevaba la llave inglesa, tenía todo lo necesario para apretar cualquier parte de la transmisión, y entre otras cosas necesitaba una llave fija del 30, que suplí con la "english key".

La bajada a Monesterio fue bastante bonita y divertida, con sus zonas trialerescas que hacían empequeñecer la tan sobrevalorada, en el ciclismo sevillano, trialera del camino de Santiago.

Tras esa fabulosa bajada por el lecho seco de un arroyo llegamos a Monesterio no sin antes superar algún repechillo. Buscamos una fuente, la cuál tenía dos buenos caños de agua fresca, porque entre arreglo y arreglo se nos había echado la hora encima y no veas como pegaba el sol y lo que se agradeció la frescura del agua.

El camino de vuelta era pisteo, primero con un falso llano y una leve subida, que terminarían con una bajada kilométrica casi hasta Cala, donde Jesús tuvo más prudencia que un cura bautizando a un Grenlin.

En definitiva un nuevo rutón descubierto, el cual tendremos que repetir cambiando la subida asfaltada por el camino de la muerte que vimos, y que esperemos que no se nos presenten tantas averías como en esta ocasión.

A ver si Jesús hace la crónica del Mogote Xtrem, y ya le podemos hablar de Don.

¡Nos vemos en los caminos!






1 comentario:

Jesus dijo...

Últimamente no tengo suerte, la semana pasada pinché, y en esta ruta la verdad que eché de menos el freno delantero cuando entramos en la zona de trialera aunque al menos no tuve que retirarme y pude terminar la rutilla.

La zona me gustó, pero a pesar que no hicimos muchos kilómetros acabé un poco reventado, aunque como casi siempre con el retraso de las crónicas eso ya ha sido superado por la paliza del mogote que me toca reseñar a mi.

Buena crónica!!, la S.B Pepineitor sigue haciendo rutas y senderos!! a pesar de los retrasos en las crónicas y del tiempo, que se pone en nuestra contra para intentar convertirnos en seres sedentarios y apoltronados en un sofá...