jueves, 8 de julio de 2010

Guillena-El Ronquillo-El Garrobo o una muerte de verano

¡Buenas biciclistas!

Al contrario que en la entrada anterior rebosaba felicidad y entusiasmo en esta entrada no podré decir lo mismo. Se podría decir que si yo fuera un picao el mismo Sábado hubiera vendido la bici, ¡que malamente me encontré durante la ruta!

Esta ruta fue orquestada por Guillermo y planificada por mí, buscábamos una ruta de unos 70km y con 1000m de desnivel, se puede decir que el objetivo se cumplió, aunque la forma de llevar a cabo dicha gesta no fue ni mucho menos la más ortodoxa.

Muy tempranito y con pocas horas de sueño partíamos Jesús y yo (Cuberos) dirección Guillena, donde nos encontraríamos con otros 13 locos: Guillermo, Jaspa y su flamante trek, Hispalnet, Bike travel, parte de la familia Moreno, Pessoto, Canondale... unos figuras de la bici. El camino por el restringido fue a un ritmo bueno, pero sobre la mitad empezó a darme un dolor de cabeza curioso, que quedó en el olvido gracias a la camarera de la Cantina y su prodigiosa aspirina.

La subida de Los Toros fue al tran tran, atrancao, con decir que Jesús subió más rápido que yo... Pero donde realmente lo pasé mal fue desde la Dehesa del Serrano hasta los Lagos del Serrano, eran las 10 de la mañana y el sudor me chorreaba por la cara, no he sudado en la bici así en toda mi vida. Sufriendo sufriendo llegué hasta El Ronquillo, donde el descanso se puede decir que me dio la vida, agüita, barritas y acuarius. El dolor de cabeza prácticamente eliminado y cumpliendo el horario previsto.

Bonita y larga bajada hasta la Minilla y ya por el trazado del tren minero hasta la media fanega, esta parte se hace llevadera al ser totalmente llana, aunque el calor nos hace ponernos en lo peor para subir la media fanega. Una vez enlazamos con la antigua-antigua N-630 siguiendo los consejos de Torrente me tiré al pilón para refrescarme un poco, es alucinante que todavía haya agua por la sierra sevillana.

En la subida de la media Fanega de nuevo Jesús se me adelantó, aunque me costó puedo decir que esperaba que la cosa fuera mucho peor, sudé como un pollo y mi mente me insultaba con cada pedalada, pero se puede decir que ya estaba un 90% de la ruta hecha. Reagrupamiento en la "cima" y rumbo a El Garrobo.

A más de mil nos plantamos en este pueblo sevillano, donde de nuevo nos refrescamos en su fuente. Cogimos dirección Gerena para desviarnos por la falsa trialera del Garrobo. Se puede decir que en este sendero me desfondé del todo, y lo más importante, Jesús terminó más perjudicado que yo, lo que me da cierto regustillo dulce después de la humillación sufrida en el resto de la ruta. Se puede decir que terminé vacio de fuerzas.

Al final una buena posruta con su carnaca y su cerveza en hermanos Punta, que desde mi punto de vista ha bajado varios enteros desde la última vez, aunque esas litros son de otro planeta.

Pese a las malas sensaciones vividas en la bicicleta, estoy seguro que se debieron a la falta de sueño y al calor que hizo durante la ruta, estoy convencido de que se trata de un hecho aislado, lo que si me sorprende es que el tramo La Cantina - El Ronquillo me ha matado siempre que lo he hecho, así que lo tengo como una espinita clavada, el día menos pensado me voy a hacerlo de nuevo.

Sin más me despido de vosotros, como habréis notado las entradas tienen menos frecuencia, pero es debido a la falta de tiempo y a la falta de internet que sufrimos en verano Jesús y yo, básicamente los únicos miembros activos de esta nuestra/vuestra Sección Biciclista Pepineitor, espero poderos contar nuevas nuevas desde Espartinas, donde empezaré con mi temporada de Cárcavas jajajajaja

Nos vemos en los camino.