Entrenando cuestas

Buenas biciclistas.

Como bien dice el amigo Francho, Paterna se acerca. Logicamente, cada uno está entrenando como puede. Adelantar sufrimiento lo llamo yo, porque es sufrir ahora para no sufrir tanto después.

En el caso de Cuberos y yo, estamos saliendo a entrenar los martes y jueves por la tarde, y el fin de semana. Mi idea es complementarlo con uno o dos días de natación a partir de la semana que viene (para no sufrir tanto con la espalda en las subidas).

Esta semana tocaba primer contacto con las cuestas. El martes salimos por la Verea hacia Salteras, donde bajamos por carretera para enlazar con el camino amarillo, subir la Bañera y desde Valencina, tirar hacia casa de nuevo. La verdad es que la ruta salió más corta de lo que queríamos porque perdimos tiempo en intentar ajustar el cambio trasero de mi bici (sin mucho éxito) al principio. El miércoles me tocó jugar a los mecánicos y me pasé toda la tarde para intentar ajustarlo bien, pero no pensé que fuera tan difícil... así que sigue llendo regular :(

Ayer jueves sí que nos salió una rutilla más curiosa. Salimos desde Bormujos en dirección Valencina pasando por Gines, donde cogimos el carril bici. Desde Valencina bajamos por carretera, donde alcancé la velocidad más alta que había cogido con la bici: 63'7 km/h. Cuberos se puso a 68 y pico.. (LOCOOOOOO). Tras bajar, subimos por la Bañera y volvemos a bajar por la Matamachos.
Una vez bajada ésta última, cogemos el camino amarillo hasta la cuesta de los depósitos, por donde volvimos a subir. En esta subida me pareció increible lo bien que me sentía. Siempre que la había subido antes, había tenido una tentación constante de echar pie a tierra, y esta vez se me hizo hasta corta.
Volvemos a bajar por carretera y volvemos por el camino amarillo hacia la Bañera por donde subimos definitivamente (esta vez ha sido la única en que la he subido sin parar a descansar en el puente de las vías).
Desde allí cruzamos Valencina y volvemos a Gines por el carril bici. En Gines nos despedimos, y Cuberos se va hacia Espartinas. Yo vuelvo al punto de partida. Aquí pongo el perfil de mi ruta:

Como novedades a destacar por mi parte en esta ruta, he aprendido a saltar con la bici, y me harté de saltar badenes cual liebre por el campo :D

Como sensaciones, pues fantásticas oiga! Toda la ruta, que fue de unos 30km para mi, se hizo en 2 horas exactas, sin parar para nada. La media, para haber hecho 3 subidas, fue muy buena (16 y pico). Se nota que las pulsaciones van bajando un poquitín, y he ganado bastante fuerza en las piernas, lo que me permite llevar desarrollos algo más largos. Esto en las subidas ayuda mucho, porque así el esfuerzo no se alarga tanto en el tiempo.

Mañana volveremos a ponernos a prueba. Nos espera Paterna 47. Ya contaremos qué tal nos ha ido con esta ruta, similar en esfuerzo a la clásica de Guillena-Castilblanco y a la ruta alternativa corta de la carrera.

Nos vemos en los caminos!